Temuco, Chile, 13 de octubre de 2018.
Los días 11 al 13 de octubre de 2018 antropólogos, abogados, sociólogos, magistrados, y otras profesiones a fines e interdisciplinarias; estudiantes, autoridades indígenas, líderes y jóvenes indígenas procedentes de Chile, Brasil, México, Colombia, Argentina, Ecuador, Bolivia, Perú, Venezuela, Austria, Francia, España reunidos/as en el X Congreso de la Red Latinoamericana de Antropología Jurídica (RELAJU) bajo el título de “Los desafíos para la diversidad y el pluralismo: a 20 años de la creación de la Red Latinoamericana de Antropología Jurídica”, analizamos la situación que guardan los derechos colectivos de los pueblos indígenas en el continente a través de la presentación de investigaciones realizadas en distintos países y por grupos de investigación interdisciplinarios, y con la participación de distintos actores sociales, particularmente representantes del pueblo mapuche.
Discutimos y documentamos problemáticas profundamente complejas y preocupantes que compartimos en todos los países de América Latina, especialmente las relacionados con la invasión, despojo y contaminación de los territorios indígenas, a consecuencia de megaproyectos extractivistas y de infraestructura; la criminalización de representantes de pueblos indígenas por el ejercicio de derechos y la justa protesta; la dificultad para ejercer los derechos reconocidos que es parte del problema de la “brecha de implementación”.
Preocupados/as por los contextos de violencias y vulneración de los derechos acordamos emitir la siguiente
DECLARACIÓN
- No obstante que la mayoría de los Estados de la región han ratificado el Convenio 169 de la OIT, están vinculados a los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, y han realizado reformas constitucionales que reconocen los derechos de los pueblos indígenas y afro-descendientes; vemos con preocupación que los mismos están adoptando normas, políticas y decisiones administrativas y jurisdiccionales regresivas, sobretodo en lo referente a derechos territoriales, personalidad jurídica y jurisdicción indígena.
- Además nos preocupa que aún haya Estados que no reconozcan en sus normas constitucionales la existencia y derechos de los pueblos indígenas y afro-descendientes; por lo cual apoyamos la lucha de estos pueblos por su reconocimiento y la efectividad de sus derechos.
- Exigimos el cumplimiento efectivo de los derechos de los pueblos indígenas y afro-descendientes, el respeto de su personalidad jurídica, la garantía y seguridad jurídica de sus territorios ancestrales; la participación, consulta y consentimiento previo libre e informado, y el respecto de la jurisdicción indígena y el pluralismo jurídico igualitario.
- Exigimos el cese inmediato de la criminalización de los movimientos indígenas, sus autoridades, dirigentes y defensores, como las distintas formas de hostigamiento, detenciones, procesos y condenas arbitrarias; las declaratorias de estados de emergencia; el uso ilegal de la fuerza; la militarización de los territorios; la tortura y violencia contra niños y mujeres. Además nos preocupa el incremento de la violencia como resultado del crimen organizado, con la connivencia de los Estados, por su impacto en los pueblos indígenas y afrodescendientes, tal como
sucede en algunos países del continente. - Apoyamos las luchas históricas y reivindicaciones de los pueblos indígenas y exigimos que los Estados den cumplimiento efectivo a sus derechos, en el marco de sus obligaciones internacionales. En particular:
– demandamos que el Estado chileno respete los derechos al territorio ancestral del pueblo mapuche y cese la criminalización de sus integrantes;
– exigimos que el Estado brasileño cumpla con la demarcación de los territorios de pueblos indígenas y quilombolas y cese su represión;
– exigimos que el Estado peruano respete la personalidad jurídica de los pueblos originarios de Perú. - Nos manifestamos por un uso ético de las intervenciones antropológicas en procesos judiciales como los peritajes antropológicos.
- Vemos con preocupación el avance de las fuerzas políticas conservadoras en América Latina por las medidas regresivas que proponen con relación a los pueblos indígenas, por lo que exigimos el respeto a los derechos conquistados. En especial nos alarma la posible llegada de Jair Bolsonaro a la presidencia del Brasil dadas sus recientes declaraciones referidas a que no respetará ni demarcará ninguna tierra indígena, ni titulará las tierras de los quilombos; lo cual constituye una amenaza a los derechos de los pueblos indígenas y a las propias obligaciones constitucionales del Estado brasileño.