PNUD presenta IV Encuesta Auditoría a la Democracia

El estudio aborda temáticas relativas a la percepción de la ciudadanía acerca del estado de la democracia en el país, de las instituciones, la participación política y social, los temas de probidad y corrupción, reformas políticas, entre otras.

Los resultados muestran que los chilenos continúan valorando la democracia y consideran que Chile será más democrático en el futuro, pese a que la evaluación de su funcionamiento empeoró: la percepción de que la democracia funciona mal o muy mal aumentó desde 20% (2012) a 40% (2016). Esta situación, además, se da en un contexto en el que disminuyen los niveles de confianza, aumenta la percepción de corrupción en todas las instituciones ­–públicas y privadas– y se profundiza el distanciamiento entre las elites y la ciudadanía.

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Santiago, 9 de septiembre de 2016. El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo en Chile (PNUD) presentó hoy en el ex Congreso Nacional la IV Encuesta Auditoría a la Democracia. Con el objetivo de abrir los resultados al diálogo, los datos de esta versión de la encuesta fueron presentados en un formato de mesa redonda, donde actores de gobierno, partidos políticos, parlamentarios, empresarios, académicos y distintas organizaciones sociales debatieron en torno a los resultados con el objetivo de analizar propuestas que permitan fortalecer y profundizar la democracia chilena.

La Encuesta Auditoría a la Democracia es un estudio que se realiza desde el 2008 entregando evidencia sobre procesos y cambios de largo plazo en materia de percepciones relativas a la política, el funcionamiento del régimen democrático y la relación entre ciudadanía y sus representantes.

Según los resultados de la IV Encuesta, a pesar que los chilenos continúan valorando la democracia como la mejor forma de gobierno (6 de cada 10),  se muestran cada vez más críticos respecto a su funcionamiento. Estas cifras corroboran las conclusiones del anterior  Informe Auditoria a la Democracia (2014) del PNUD, en relación a que el país enfrenta un problema de carácter estructural desde hace ya más de una década. En consecuencia, el descontento de la ciudadanía con el funcionamiento del sistema político y sus instituciones ha sido paulatino más que repentino.

De esta forma, la distancia y falta de identificación política ha aumentado de manera sistemática: quienes no se identifican con ninguna posición política (ni izquierda, ni centro, ni derecha) pasa de un 34% (2008) a un 83% (2016). A la vez, quienes no se identifican con ninguno de los partidos políticos existentes pasa de un 53% (2008) a un 83% (2016).

La falta de identificación es una de las expresiones de un sistema de representación tensionado. Esto se refleja en que casi 9 de cada 10 chilenos considera que tanto el Congreso como los partidos políticos realizan muy mal o mal la función de representar los intereses de los ciudadanos.

Por otra parte, el estudio incluye un amplio conjunto de preguntas en materia de probidad y corrupción, que evidencian que Chile no es un país donde exista corrupción sistémica que permee las relaciones entre Estado y Sociedad. El 99% de los encuestados dice no haber tenido que pagar nunca una coima o hacer un favor para obtener un servicio de una empresa privada o resolver un problema por parte de un servicio público. Sin embargo, quienes perciben que hay mucha corrupción en distintas instituciones públicas y privadas aumentó en promedio al doble en los últimos 6 años, de un 23% el 2010 a un 47% el 2016.

Finalmente, a pesar de la visión crítica que manifiestan las personas respecto de las élites y las instituciones públicas y privadas, la IV Encuesta Auditoría a la Democracia también muestra un aumento en el interés por los asuntos públicos, apoyo a reformas políticas que permitan ampliar mecanismos de participación y una visión positiva respecto de la democratización en el país. En este sentido, cabe destacar que disminuyen los estereotipos de género en política, aumentando la proporción de chilenos que está en desacuerdo con que los hombres son mejores líderes políticos que las mujeres de un 60% (2013) a un 78% (2016)

Para Silvia Rucks, Representante Residente del PNUD en Chile, “en un contexto en que aumenta la preocupación por posibles retrocesos democráticos a nivel mundial, con tensiones entre poderes de los estados y disminución de espacios de participación, este estudio muestra que los ciudadanos chilenos siguen apoyando el sistema democrático manifestando una expectativa de su mejoramiento en el futuro. Más aún, apoyan la renovación de la política, prefiriendo, al ser consultados, a candidatos jóvenes, que representen a sus propios territorios sin manifestar estereotipos de género respecto de sus futuros representantes”.

La encuesta fue realizada a través de entrevistas cara a cara a una muestra de 1.532 personas, representativas de los habitantes del país. El trabajo de campo se efectuó entre el 6 de mayo y el 30 de junio de 2016.

  • Los resultados completos del estudio están disponibles aquí

Cuestionan gesto de Bachelet al rescate de Obama y el TPP

Por Chile Mejor Sin TPP

Al reiterar su respaldo al Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) y el próximo envío del proyecto al Congreso, la presidenta Michelle Bachelet hizo oídos sordos a las demandas  de crecientes sectores sociales y políticos que exigen se detenga el proceso. En medio del descrédito de su gobierno, la mandataria escogió un desayuno con la Cámara Chileno Norteamericana de Comercio (ANCHAM) para comprometer el envío del proyecto al Congreso en el segundo semestre.

Cuatro días después de la masiva marcha por el fin de las AFPs  realizada el 21 de agosto pasado, la Presidenta dialogó con ANCHAM, entidad atenta a posibles amenazas a sus inversiones en el país. Ella aseguró  que el tratado “otorgará beneficios al país y asegura una apropiada protección de las sensibilidades de Chile en el proceso”. Sin embargo las sensibilidades de la inmensa mayoría de los chilenos y chilenas, están hoy directamente ligadas al fin del sistema de las AFPs y el fin del lucro en la educación. Las cláusulas de resolución de controversias inversores/Estado contenidas en el TPP avalado por la Presidenta constituyen un candado a estas demandas.

Inversiones en la mira

La Presidenta Bachelet y su poderoso ministro de Hacienda Rodrigo Valdés no pueden ignorar que las empresas de Estados Unidos Metlife, Principal y Prudential son dueñas de  Pro Vida, Cuprum y Habitat y controlan el 75% de los fondos de las AFPs. ¿Cuán sensibles serían ellas ante un cambio hacia un sistema de reparto? La Presidenta y su cuestionada ministra de educación Adriana del Piano también saben que el grupo norteamericano Laureate, se autodescribe como empresa con fines de lucro y es dueño de las universidades Andrés Bello, U de las Américas, Viña del Mar y del centro AIEP. Entre los años 2006  a 2015, Laureate recibió $588.725.000 por concepto de crédito con Aval del Estado (CAE). El TPP permite a los inversionistas demandar al Estado chileno en tribunales internacionales en caso de no estar aseguradas sus expectativas de ganancia o ser sometidos a una expropiación.

Inexistentes beneficios

La Presidenta fue incapaz de cuantificar los supuestos beneficios que el TPP traerá al país, dado que el estudio “TPP, Impacto en Chile y la Región” encargado por su canciller Muñoz a la Fundación Chile 21, aseguró no contar con información respecto del impacto económico del tratado. Ese estudio sí alertó sobre posibles consecuencias políticas como su impacto en las relaciones con China, el mayor socio comercial de Chile, sin embargo Bachelet sostuvo en el desayuno con la ANCHAM que se fortalecerán los lazos con Asia. La presidenta no se ha referido a las críticas formuladas en abril de este año por siete relatores y expertos en DDHH de Naciones Unidas ante su gobierno, respecto de cómo las disposiciones del TPP afectan los derechos de los pueblos indígenas, y entre otros, los derechos a la salud, a la libertad de expresión y participación, y a la cultura. Aunque habló ante empresarios, la Presidenta no se refirió a las críticas menciones al TPP incluidas en el Estudio de Línea de Base en Empresas y Derechos Humanos en Chile, publicado por el Centro de DDHH de la Universidad Diego Portales. La citada investigación alerta sobre los impactos en leyes laborales, cuestiona la obligación de ratificar el convenio UPOV 91 de privatización de la semilla y afirma que el TPP bloqueará la  entrega de remedios genéricos debido a la extensión de las patentes de los medicamentos biológicos. Agrega que el gobierno está asimismo omitiendo la consulta indígena que debiera realizar por el Convenio 169 antes del envío del proyecto al Congreso.

Alineándose ciegamente con Barak Obama en el intento del presidente de Estados Unidos de apurar la ratificación, la presidenta tampoco  acusó recibo de la posición disidente de parlamentarios tanto de la Nueva Mayoría como de oposición.

Como Plataforma Chile Mejor sin TPP redoblaremos nuestros esfuerzos a lo largo del país para construir un sólido, diverso y amplio bloque ciudadano y parlamentario contra el TPP que impida la entrega de nuestra soberanía y futuro.