- Convocado entre otros actores por el Observatorio Ciudadano, contó con el apoyo de Cepal; OACNUDH Regional América del Sur; Unión Europea y Fundación Heinrich Böll.
- Del encuentro emanó una declaración donde se reafirma la necesidad de que los proyectos, principalmente extractivos, cuenten con el consentimiento de las comunidades impactadas.
Con ocasión de la realización de la Cuarta Consulta Regional sobre Empresas y Derechos Humanos, realizada en dependencias de Cepal en Santiago de Chile, se realizó en la sala Celso Furtado y en forma previa a la reunión de los representantes de los gobiernos el Taller “Consulta y consentimiento previo, libre e informado-Desafíos para la autonomía y la libre determinación de los pueblos indígenas en el contexto de la actividad empresarial”.
El encuentro reunió a diversos representantes de organizaciones de derechos humanos e indígenas, así como miembros de comunidades indígenas de la región, quienes con una mirada crítica se refirieron a la situación que viven sus países y territorios debido a la imposición de proyectos sin respetárseles su derecho a consulta y al consentimiento previo, libre e informado, así como los derechos que estos pueblos tienen sobre sus tierras, territorios y recursos naturales, y que hacen parte del derecho universal de la libre determinación, un principio fundamental reconocido en la Carta de las Naciones Unidas.
Como se pudo constatar en la presentación de distintas realidades, la ausencia de procesos de consulta de buena fe o la ausencia absoluta de ellos, ha permitido la instalación de proyectos empresariales y/o extractivos, que impactan los derechos colectivos de sus comunidades y modos de subsistencia. En las experiencias analizadas, se verifica que la decisión de desarrollar un proyecto se han adoptado incluso existiendo oposición y rechazo absoluto de parte de las comunidades.
¿Qué significa desarrollo? ¿Qué desarrollo queremos nosotros como pueblos indígenas?, basadas en el derecho que el Convenio 169 de la OIT garantiza a estos pueblos a definir sus propias prioridades en materia de desarrollo, fueron algunas de las interrogantes que marcaron el debate sostenido con posterioridad a las intervenciones. Allí se destacó que es fundamental confrontar el cómo se percibe la relación con la tierra, no como recurso natural sino como elemento del que se forma parte. Se discutió también respecto a prácticas comunes de las grandes empresas y sus discursos sobre una supuesta actuación de manera responsable en sus procesos.
En del taller Marina Marçal, de Oxfam Brasil, presentó su campaña «não é não» (no es no), aludiendo a la necesidad de que la opinión de las comunidades sea respectada. “A menudo las consultas solo se hacen porque la ley lo requiere, sin respetar su idea inicial, que se trata de consentimiento y no solamente de consulta. De ahí la exigencia de que el resultado de una consulta también sea vinculante”, señaló.
Las y los participantes además de compartir sus experiencias, se refirieron a la necesidad de establecer diálogos horizontales, respetando las tradiciones, la autodeterminación y autonomía de los pueblos, así como también la justicia indígena, las formas de economía indígena y la administración territorial.
Se hizo hincapié también a que se deben fortalecer los mecanismos para hacer cumplir a las empresas con su responsabilidad frente a los impactos de sus procesos productivos o extractivos, destacando una de las participantes la necesidad de avanzar prontamente en la adopción del Tratado vinculante sobre Industrias extractivos, otras Empresas y Derechos Humanos que actualmente se discute en las Naciones Unidas. Asimismo, se destacó que las empresas que intervienen en los territorios no son solo de carácter multinacional, sino que gran parte de las empresas que cometen violaciones de los derechos humanos y que no respetan el derecho a consulta de las comunidades indígenas, son nacionales o estatales.
Este encuentro internacional fue convocado por el Centro de Información sobre Empresas y Derechos Humanos, Confederación Mapuche de Neuquén, Consejo de Pueblos Atacameños, Observatorio Ciudadano, Organización Nacional de Pueblos Indígenas de Colombia (ONIC) y Oxfam Brasil. Apoyan Cepal; OACNUDH Regional América del Sur; Unión Europea y Fundación Heinrich Böll.
Te invitamos a leer la declaración en inglés y español en este enlace.