La participación de los independientes en el órgano constituyente

José Aylwin, abogado de Derechos Humanos, Observatorio Ciudadano

A menos de un mes del plebiscito del 25 de octubre próximo, las encuestas dan una clara ventaja en favor de la opción Apruebo una Nueva Constitución para Chile (Apruebo) sobre la que se opone a ella (Rechazo). La derrota de esta última opción es tan evidente, que cada vez son más los personeros de la derecha chilena que, ya sea por oportunismo o realismo, se han sumado al Apruebo. Aunque los resultados de dichas encuestas en relación al órgano encargado de la elaboración de la Nueva Constitución a ser electo en abril de 2021 de ganar el Apruebo son más estrechos, todas ellas dan ventaja a la opción Convención Constitucional a ser electa en su totalidad por la ciudadanía, por sobre la Mixta Constitucional, a ser electa solo en una mitad por la ciudadanía e integrada en la otra mitad por parlamentarios designados por el Congreso Nacional.

Las tendencias comparadas en materia de construcción constitucional en estados democráticos demuestran que las constituciones modernas son elaboradas crecientemente por órganos constituyentes plenamente electos por la ciudadanía, comúnmente denominados Asambleas Constituyentes. Así en los procesos de elaboración constitucional verificados a nivel global en los últimos quince años (2000-2015), las Asambleas Constituyente han sido el mecanismo más utilizado (41% de los casos). En el contexto de América Latina, un 46% de los 28 cambios constitucionales verificados desde 1947 a la fecha se han materializado a través de este mecanismo (PNUD, 2015).

Ello no es una casualidad; los órganos constituyentes totalmente electos por la ciudadanía permiten una mejor representación de las diversidades existentes en los estados, hasta hace poco negadas o excluidas de estas instancias. De allí la importancia del triunfo de la opción Convención Constitucional por sobre la Convención Mixta. La primera opción adquiere más relevancia teniendo presente que dicho Congreso, acuerdo a una encuesta del CEP, llegó a contar a diciembre de 2019 con una confianza de tan solo un 3% de la población encuestada.

Es en este contexto que hoy se debaten en el parlamento diversas iniciativa orientadas a superar las barreras impuestas por el sistema sistema electoral vigente a participación política de los independientes en instancias de toma de decisión, a fin de posibilitar su inclusión efectiva en el futuro órgano constituyente. Una reforma constitucional aprobada en marzo pasado por el Congreso Nacional (Ley N° 21.216) junto con establecer la paridad entre hombres y mujeres en la elección de convencionales constituyentes, permitió la inscripción de listas independientes para la elección de convencionales. Para hacer posible dicha inscripción, sin embargo, se requiere cumplir con el requisito de patrocinio obtenido ante notario (o ante el Servicio de Registro Civil) de un número equivalente al 0,4% de votos válidos en la última elección de diputados y cuyos domicilios electorales estén en el respectivo distrito, con un máximo de 1.5% por lista, debiendo estos patrocinios estar suscritos de manera presencial.

Dadas las dificultades que ello impone a la participación de los independientes en el órgano constituyente, en particular en el contexto de la pandemia, es que recientemente fue presentada una moción parlamentaria liderada por el Diputado Auth, suscrita por diputados de oposición y de Evópoli, en la que se propone rebajar dichos requisitos, disminuyendo a un 0,2 el porcentaje de electores exigido para la inscripción de una candidatura individual, y a 0,5% para inscribir una lista independiente. La moción propone además, de manera excepcional, que el Servicio Electoral pueda disponer de su plataforma digital en la recepción de los patrocinios de candidaturas y listas independientes a través del sistema de clave única del Estado. (Boletín 13790-07). Otra iniciativa fue presentada este mes por los senadores Huenchumilla y Guiller a objeto de que las listas de candidatos independientes que se conformen en los distritos electorales puedan acordar pactos electorales con uno o más partidos políticos. Dicha iniciativa propone además que esta inscripción pueda realizarse bajo las reglas de la ley N°19.799, sobre Documentos electrónicos, con firma electrónica, y propone normas sobre financiamiento electoral de las listas de dichos candidatos, a fin de igualarlos a los partidos políticos en dicha materia (Boletín N° 13.792-07)

Finalmente, la semana pasada el diputado Jackson junto a la bancada del Frente Amplio presentaron otro proyecto promoviendo, junto a la incorporación de candidatos independientes, el establecimiento de mecanismos de participación ciudadana en las deliberaciones del órgano constituyente. Para lo primero, el proyecto propone permitir que los candidatos independientes a la Convención, sea constitucional o mixta constitucional, puedan asociarse entre ellos al interior de un pacto electoral con uno o más partidos políticos, de modo de no requerir patrocinio ciudadano. Asimismo, el proyecto propone establecer que, en el caso de que los candidatos independientes requieran el patrocinio ciudadano, este pueda materializarse mediante un sistema en línea con la clave única proporcionada por el Servicio de Registro Civil e Identificación, en lugar de la firma presencial ante notario. Para lo segundo, el proyecto propone establecer la obligación del órgano convencional de incorporar en el procedimiento de formación de la nueva constitución, mecanismos de participación ciudadana. (Boletín 13804-07)

El gobierno, a través de la Secretaría General de la Presidencia, y de la Secretaría General de Gobierno, se reunió con grupos de independientes a objeto de analizar las iniciativas, manifestando disposición a apoyar la iniciativa del diputado Auth a través de una indicación del ejecutivo. De acuerdo a informaciones de prensa, sin embargo, el gobierno vería con distancia la rebaja de los porcentajes requeridos para la inscripción de candidatura individual y listas de independientes propuestas por la iniciativa parlamentaria.

La importancia de la participación de independientes en el órgano constituyente está determinada por la naturaleza misma de las constituciones, las que además de ser instrumentos legales, son también instrumentos políticos y sociales que expresan los valores de una sociedad, permiten la construcción de acuerdos entre los distintos sectores en ella existentes, y la distribución del poder (International IDEA, 2014). De allí que la participación en los procesos de construcción constitucional de las diversidades expresadas, además de aquella de naturaleza étnica y sexual, por los independientes que representan el sentir de la comunidad, más allá de los partidos políticos, sea fundamental para que el texto que emane de ella cuente una adhesión social que asegure su efectividad. Dicha participación adquiere mayor relevancia aun en el contexto de la grave crisis de credibilidad de los partidos políticos, los que de acuerdo al mismo Centro de Estudios Públicos llegaron a diciembre de 2019 a contar con una confianza de la población que no superaba el 2% del total encuestado.

A ello se suma por cierto la importancia, señalada en artículos anteriores, de que el órgano constituyente que con mucha probabilidad será electo en abril próximo, cuente con una representación de los pueblos indígenas proporcional a su población, cercana al 13% del total del país. cuestión que está siendo analizada por el Senado a partir de una moción parlamentaria (Boletín 13129-07).

Si la nueva Constitución ha de ser lo que el jurista Patricio Zapata ha denominado con acierto “la casa de todos y todas”, a través de la cual se ponga término a las exclusiones de todo tipo que han sido características de la historia republicana, exclusiones que como sabemos fueron el detonante del estallido social de octubre de 2019, se hace urgente que el parlamento apruebe las iniciativas señaladas. Ello a fin de establecer mecanismos que posibiliten la participación de los y las independientes, que representan a la inmensa mayoría de los ciudadanos de este país, en el órgano encargado de la construcción la nueva carta fundamental para Chile. Solo de esta manera se podrá conseguir la adhesión al futuro texto constitucional que surja de este proceso, y a través de dicha adhesión, lograr la estabilidad que garantice una sana e inclusiva convivencia democrática.

Ya se encuentra disponible el documental “La Comunidad Colla Pai Ote: un territorio de vida amenazado”

El Observatorio Ciudadano y la Comunidad Colla Pai Ote los invitan a visualizar el documental “La Comunidad Colla Pai Ote: un territorio de vida amenazado”. A través de las voces e imágenes de la vida cotidiana de sus comuneros y comuneras el documental nos muestra cómo sus formas de vida tradicionales se han visto afectadas por la intervención de proyectos mineros en la zona, y como sus lucha por el reconocimiento, protección y titulación de su territorio de uso y ocupación ancestral sigue aún sin ser atendida.

Este trabajo se documentó en enero del 2020 y ha sido elaborado como parte del proyecto “Protección de territorios de vida” que ejecuta el Observatorio Ciudadano con el el apoyo de la International Land Coalition (Coalición Internacional para el Acceso a la Tierra) a través de su “Iniciativa de co-aprendizaje para la protección comunitaria de la tierra” y del Programa de Pequeñas Donaciones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial- PNUD en el marco de la Iniciativa Mundial de Apoyo a los TICCA.

El documental complementa el trabajo previo del Observatorio Ciudadano con la Comunidad Colla Pai Ote para identificar y evaluar los impactos que los proyectos mineros, desarrollados por empresas canadienses, están teniendo sobre sus derechos humanos. Sus resultados se encuentran contenidos en el Informe “Evaluación de impacto en derechos humanos de proyectos mineros canadienses en territorio colla en Chile: el caso de Kinross y la Comunidad Pai Ote. Disponible en: https://observatorio.cl/evaluacion-de-impacto-en-derechos-humanos-de-proyectos-mineros-canadienses-en-territorio-colla-en-chile-el-caso-de-kinross-y-la-comunidad-pai-ote/

El documental puede ser visualizado AQUÍ

Tribunal Ambiental de Valdivia ordena suspender tramitación de Central Llancalil

La medida cautelar fue solicitada por los reclamantes, debido a los impactos existentes para el medio humano.

Por dos votos contra uno, el Tribunal Ambiental de Valdivia, con jurisdicción desde Ñuble a Magallanes, ordenó la medida cautelar conservativa de suspensión del procedimiento de evaluación ambiental del proyecto “Pequeña Central Hidroeléctrica Llancalil”, de la comuna de Pucón, Región de La Araucanía, mientras se resuelve el fondo de las reclamaciones que actualmente se tramitan en sede judicial.

Según la resolución notificada este viernes, los documentos presentados por los reclamantes para justificar la necesidad de la medida cautelar dan cuenta “de una estrategia de aproximación atomizada con las personas de la comunidad, y una relación erosionada entre ésta y el titular del proyecto, incluso desde antes de la actual evaluación. Por ello, en el contexto actual, el levantamiento de la información sobre medio humano y otros componentes, requerido por la autoridad en el acto reclamado, puede acrecentar el sentimiento de inseguridad, poca claridad y desconfianza en torno al Proyecto, como asimismo exacerbar lo que se aprecia como un clima de hostilidad entre la comunidad y el titular, configurándose así el peligro en la tardanza”.

El Tribunal además estimó que “los antecedentes referenciados constituyen presunción grave de la existencia de una afectación a la cohesión social de la comunidad, la que se manifiesta en una tensión latente y un sentimiento compartido de desconfianza, en circunstancias que el medio humano corresponde a un interés jurídicamente tutelado conforme se desprende de nuestro ordenamiento ambiental (Ley Nº 19.300, arts. 4, 11 letras a), c), d); RSEIA, arts. 5, 7 y 8) y como reconoce también el SEA (Of. Ord. Nº 171649, de 27 de diciembre de 2017, que Imparte Instrucciones para la Descripción del Áreas de Influencia del Medio Humano con Enfoque de Género)”.

La resolución fue adoptada por los Ministros Sr. Iván Hunter Ampuero; Sra. Sibel Villalobos Volpi y Sr. Jorge Retamal Valenzuela, con el voto en contra del Ministro Sr. Hunter, quien estuvo por rechazar la solicitud debido a que no habría una situación de peligro que resulte meritorio de cautela y resultar la medida solicitada inadecuada para los efectos que se persiguen.

La medida cautelar fue solicitada en el marco de un conjunto de reclamaciones de ilegalidad interpuestas contra la resolución del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), que acogió parcialmente un grupo de reclamaciones administrativas en contra la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto, ordenando retrotraer la evaluación a un nuevo ICSARA y no decretó el rechazo de la DIA, como lo solicitaban los reclamantes.

Revise la resolución en causa R-15-2020: https://docs.google.com/viewerng/viewer?url=https://3ta.cl/wp-content/uploads/2020/09/R15.2020_resuelve_cautelares.pdf

Argentina suma democracia ambiental: Ratificó el acuerdo de Escazú

La ratificación de Argentina eleva a 10 el número de Estados que ya lo han ratificado en la región, restando solo uno para su entrada en vigor.

“La ratificación de Escazú se logró en un momento clave, ya que el Acuerdo otorga herramientas fundamentales para hacer frente a la emergencia sanitaria y sus muy severas consecuencias económicas y sociales. Cuando, además, la crisis climática nos golpea de manera directa al agravar las consecuencias de los incendios intencionales propagados por gran parte del territorio nacional, todo lo que signifique proteger personas y poblaciones en situación de vulnerabilidad es no solo bienvenido, sino absolutamente necesario. Por eso celebramos que Argentina se haya convertido en el décimo país en ratificar. Estamos, ahora sí, a un paso de la entrada en vigor. ¡Sigamos pidiendo #EscazúAhora!”. Andrés Nápoli, director ejecutivo de FARN.

“El Acuerdo de Escazú garantiza a mi generación que no se sigan tomando decisiones a nuestras espaldas que pongan en riesgo nuestro futuro”. Nicole Becker, cofundadora de Jóvenes por el Clima Argentina y representante por Argentina del Acuerdo de Escazú.

Buenos Aires, 25 de septiembre de 2020. – Con 240 votos a favor, 4 en contra y 2 abstenciones, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó hoy el proyecto de ratificación del Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe, conocido como “’Acuerdo de Escazú’’, al que más de 220 organizaciones y más de 400 personas individuales ya habían manifestado su adhesión.

Así, nuestro país -que había sido un actor clave en el proceso de negociación previo a la adopción del tratado- se convirtió en el 10° de la región en concretar su ratificación. Para que finalmente entre en vigor, se necesita alcanzar la ratificación en al menos 1 país más (11 en total).

El Acuerdo de Escazú es el primer tratado ambiental a nivel regional que busca promover los derechos de la ciudadanía de acceso a la información, la participación pública en cuestiones que la afecten, y la justicia en asuntos ambientales. Es, a su vez, el primero en el mundo que establece -de manera vinculante- claras garantías para proteger a quienes defienden los derechos humanos en temas ambientales, cuestión sumamente relevante para América Latina y el Caribe, la región donde más personas son asesinadas por año por realizar esa tarea (Global Witness, 2020).

La efectiva implementación del Acuerdo de Escazú en América Latina y el Caribe significará un paso hacia la consolidación de la democracia ambiental y el fortalecimiento de los derechos de las personas a vivir en un ambiente sano y a un desarrollo justo, sostenible e inclusivo.

CONTACTOS
Andrés Nápoli: +5491144965055
Nicole Becker +5491156945012

Coordinador del Área Jurídica del Observatorio Ciudadano obtiene primer lugar en Concurso Nacional de Comentarios de Sentencias

El abogado Felipe Guerra Schleef, Coordinador del Área Jurídica del Observatorio Ciudadano y miembro del Programa de Doctorado en Derecho de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Austral, obtuvo el primer lugar en la segunda versión del Concurso Nacional de Comentarios de Sentencias del Tercer Tribunal Ambiental, con el trabajo “La invalidación impropia en la jurisprudencia del Tercer Tribunal Ambiental: Un caso de laguna axiológica en el Derecho ambiental chileno”.

La información fue entregada el pasado lunes 14 de septiembre, por el Presidente del Tribunal, Ministro Iván Hunter Ampuero, quien destacó el alto nivel de las postulaciones y felicitó a los ganadores de esta segunda versión del Concurso.

Informó, además, que la premiación se desarrollará en la ceremonia de aniversario institucional, que se llevará a cabo en diciembre; y anunció que en los próximos días se abrirá la convocatoria para la tercera versión de esta actividad.

Latinoamérica: Pueblos indígenas y afrodescendientes exponen declaraciones para dar inicio al V Foro Regional sobre Empresas y Derechos Humanos

Durante dos eventos previos al V Foro Regional sobre Empresas y Derechos Humanos en América Latina y el Caribe, pueblos indígenas y afrodescendientes de la región se reunieron para debatir los retos que implica la actual situación del Covid-19 y las continuas problemáticas que viven por la actividad empresarial en sus territorios.

Discutieron la falta de implementación del Covenio 169 de la OIT y la falta de procesos verdaderos de consulta y consentimiento previo, libre e informado. También discutieron la falta de mecanismos que garanticen la participación verdadera de estas comunidades en la toma de decisiones sobre proyectos de inversión económica en sus territorios.

Lo pueblos indígenas y afrodescendientes, exigen que las empresas nacionales y transnacionales que amenazan el goce efectivo de sus derechos humanos, respetan sus derechos internacionalmente reconocidos.

El V Foro Regional empezó con la lectura de declaraciones por parte de los pueblos indígenas y afrodescendientes; ambas declaraciones se encuentran disponibles en español, portugués e inglés.

A continuación, ambas declaraciones en versión español:

DECLARATORIA DE PUEBLOS INDÍGENAS PARTICIPANTES EN EL V FORO REGIONAL SOBRE EMPRESAS Y DERECHOS HUMANOS PARA AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Nosotras y nosotros los pueblos indígenas, cuando el mundo entero enfrenta una grave contingencia sanitaria provocada por la pandemia del COVID-19, observamos con mucha preocupación las debilidades de los sistemas de salud pública y protección social que se ha evidenciado en los distintos países de la región. También nos alarma la patente fragilidad de los mecanismos que debieran garantizar el ejercicio pleno de los derechos humanos en este contexto. A esta situación se suman, tanto los impactos ambientales, como los referidos a la salud, causados por proyectos empresariales que contribuyen a la vulnerabilidad de las comunidades indígenas que se encuentran viviendo en contextos extractivos.

En este escenario de COVID-19, los pueblos indígenas hemos sido capaces de organizarnos para hacer frente a la pandemia con nuestros propios conocimientos tradicionales y nuestras formas de organización, ejerciendo nuestro derecho a la libre autodeterminación. Los pueblos indígenas hemos resistido por siglos (y seguimos resistiendo) las políticas de exterminio, el atropello sistemático de nuestros derechos y el despojo legalizado de nuestros territorios. Somos quienes ponemos nuestros cuerpos y territorios como guardianas y guardianes de los bienes comunes naturales y, en esta defensa de nuestros derechos, las mujeres hemos tenido un papel central.

Es por ello, que en protección de nuestros pueblos exigimos suspender de manera inmediata toda actividad que promueva el ingreso de personas ajenas a los territorios indígenas y aplicar una moratoria a toda actividad extractiva en el interior o en las proximidades de los territorios indígenas, como medida preventiva durante la pandemia. Asimismo, instamos a que se eviten proyectos de inversión y la aprobación de normas que afecten o pongan en riesgo los derechos indígenas sin llevar a cabo procesos efectivos de consulta y consentimiento previo, libre e informado.

Hoy manifestamos que existimos y tenemos derechos que la comunidad internacional y los Estados han pactado y que deben ser respetados. Por eso llamamos a la ratificación del Convenio 169 de la OIT para los Estados que aún no lo hayan hecho. Además, proponemos la creación de un mecanismo de vigilancia del Convenio, con especial énfasis en el derecho a la consulta y el consentimiento previo, libre e informado, que permita identificar a los Estados que no cumplen efectivamente estos estándares internacionales de derechos humanos y a las empresas que interfieren con los procesos de consulta.

Es necesario garantizar que los instrumentos de consulta no deriven en un mero trámite ni sean implementados únicamente por requerimiento de sentencias judiciales. Al contrario, deben asegurar los derechos sustantivos al consentimiento, incluyendo el derecho a decir “no”. Asimismo, deben acreditar la plena participación de las mujeres, así como el uso de la lengua indígena. Es necesario, además, el reconocimiento de los procesos de auto-consulta y protocolos de consulta propios de los pueblos indígenas.

Por otro lado, exigimos la plena participación de los pueblos indígenas en la identificación de los impactos de proyectos empresariales para determinar su compatibilidad -o no- con nuestras formas de vida y desarrollo. La manera en que se vienen implementando dichos estudios –tanto ambiental, como social- no identifican los impactos culturales sobre nuestros territorios ancestrales. Asimismo, es fundamental incorporar el impacto diferenciado hacia las mujeres.

Adicionalmente, reiteramos nuestra preocupación por las personas indígenas defensoras de derechos humanos, quienes son perseguidas, criminalizadas y asesinadas por defender sus territorios y los derechos de los pueblos indígenas. Necesitamos acciones concretas y conjuntas por parte de los Estados y las empresas para proteger y respetar a las personas defensoras de derechos humanos. En este sentido, solicitamos el reconocimiento y fortalecimiento de los mecanismos de protección individual y colectiva.

Para concluir, teniendo en cuenta que nos acercamos al décimo aniversario de la adopción de los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos que se sustentan en la protección, respeto y remediación; reconocemos que constituyen una oportunidad para demandar a los Estados las reformas urgentes y necesarias, así como para exigir su cumplimiento a las empresas, siempre y cuando sean acompañados por mecanismos nacionales o internacionales vinculantes y efectivos, que aseguren el acceso a la justicia y a la reparación del daño. 8 de septiembre de 2020.

 

¡NO MÁS MUERTES! LIBRE DETERMINACIÓN, CONSENTIMIENTO PREVIO, LIBRE E INFORMADO SIN RACISMO

Declaración Conjunta de las Comunidades afrodescendientes en el contexto empresarial de América Latina y el Caribe

Organizaciones de los pueblos afrodescendientes participantes en el Seminario virtual “Comunidades afrodescendientes en el contexto empresarial de América Latina y el Caribe” hacemos llegar a los asistentes a la V Consulta Regional de América Latina y el Caribe sobre Empresas y Derechos Humanos, nuestra posición respecto de los desafíos que enfrentamos en el contexto de la pandemia originada por el Covid-19, referidas a las actuaciones empresariales en nuestra región y sus impactos en nuestro pueblo.

A más de 30 años del Convenio 169 de la OIT, vemos con preocupación que, a pesar que la mayoría de nuestros países han firmado y ratificado este instrumento, los gobiernos se niegan a garantizar, en la práctica, los derechos diferenciales que nos corresponden, a pesar de ser reconocidos en Chile como pueblos tribales, o a existir la obligación de su aplicación en Argentina, Honduras o Perú, como lo confirmaron los Grupos de Trabajo de la ONU sobre afrodescendientes y sobre empresas y derechos humanos, en sus informes de misiones a esos países.

Pese a haber contribuido a la creación de riqueza en Europa y Norteamérica, a costa de la esclavización de millones de personas africanas mediante la trata trasatlántica, en la actualidad, persisten las nefastas consecuencias de la esclavización, expresada en formas de racismo estructural. Ante ello, como expresión del espíritu libertario legado por nuestros ancestros, seguimos resistiendo pacíficamente y exigiendo el derecho a las reparaciones históricas y actuales, por las discriminaciones de las que seguimos siendo víctimas desde hace varios siglos.

La pandemia del Covid-19 ha hecho más evidentes las desigualdades sociales y estructurales para las comunidades quilombolas, garífunas, negras y afrodescendientes de la región. La prevalencia de enfermedades coronarias, la hipertensión, la anemia falciforme y la diabetes, entre otras, aumenta nuestras condiciones de vulnerabilidad, al no contar en nuestras comunidades y territorios con una estructura hospitalaria mínima y de calidad para enfrentar la actual crisis sanitaria.

El desplazamiento forzado, el confinamiento, la contaminación de cuerpos de agua dulce y salada, y el despojo y destrucción física de territorios ancestrales y tradicionales de comunidades quilombolas, garífunas, negras y afrodescendientes, por la imposición legal o violenta de megaproyectos económicos, sin garantizar el derecho a la consulta y consentimiento previo, libre e informado, es otro factor de preocupación.

De modo reciente, en Colombia un juez ordenó la nulidad del título colectivo del Consejo Comunitario de la Comunidad negra de La Boquilla, argumentando que está ubicado en una zona de expansión urbana y desarrollo turístico. En Brasil, el gobierno federal intentó el desalojo de 800 familias quilombolas en el municipio de Alcântara, y continuó el avance de la carretera (BR-135) en varios quilombos de municipios del estado de Marañón.

En Honduras, el desplazamiento en tierras ancestrales garífunas por las industrias de palma de aceite y turísticas, se parece a los impactos en Ecuador y las costas colombianas. En Argentina y el Perú, trabajadores/as agrícolas y de puertos son explotados/as laboralmente por empresas sin que el Estado intervenga, porque son invisibles para las políticas públicas.

Las iniciativas estatales de reglamentar la consulta para eliminar el consentimiento de nuestros pueblos frente a actividades extractivistas y de infraestructura y turismo, no son consultadas, o incluso pretenden hacer las consultas virtuales. Y cuando las comunidades étnicas conquistamos la expedición de normas positivas, los gobiernos omiten su aplicación, por ejemplo, en Brasil, con el Decreto 4887, instrumento legal que ratifica los derechos étnico-territoriales de las comunidades quilombolas.

Las políticas de criminalización, así como la violencia ejercida por los Estados y las empresas en contra de defensores de derechos humanos, pertenecientes al pueblo afrodescendiente y sus comunidades locales, han resultado en un grave incremento de los casos de asesinatos y agresiones en contra nuestra.

Frente a estas graves y recurrentes vulneraciones, las comunidades étnicas nos movilizamos con nuestras organizaciones en cada país e internacionalmente, usando diferentes mecanismos de exigibilidad de derechos, para reivindicar y defender la garantía de nuestros derechos colectivos. Hemos instaurado demandas contra empresas, por irrespetar derechos laborales, ambientales y étnicos, exigiendo el derecho a la reparación integral de comunidades violentadas por un modelo de desarrollo que nos ha arrebatado el bienestar colectivo.

Y hoy estamos aquí, delante de ustedes, presentado esta declaración. Nos gustaría tener mucho que celebrar respecto de la realización de nuestros derechos étnico-culturales y territoriales, en los 31 años del Convenio 169 de la OIT y los casi 20 años de su ratificación por parte de la mayoría de los gobiernos de la región. Pero no; infortunadamente, tenemos que seguir denunciando la vulneración sistemática de nuestros derechos por parte de los Estados de la región y de las empresas.

Lorena Arce, codirectora Observatorio Ciudadano: “La insistencia del Estado en imponer su modelo de desarrollo, ha impedido avanzar hacia un diálogo intercultural con los pueblos indígenas”

En esta entrevista, la Codirectora del Observatorio Ciudadano y Coordinadora del Programa Biodiversidad y Alternativas al Desarrollo y representante de su organización en la Mesa Ciudadana de Cambio Climático, entrega una mirada amplia a los dilemas socioambientales que las etnias originarias enfrentan día a día y su inclusión en el proyecto de Ley Marco de Cambio Climático.


Los sucesivos hechos de violencia que se desencadenaron en la Región de La Araucanía durante el último mes,  abrieron una discusión en la opinión pública sobre la realidad que enfrentan los pueblos originarios en nuestro país, lo que según la Codirectora del Observatorio Ciudadano y Coordinadora del Programa Biodiversidad y Alternativas al Desarrollo, Lorena Arce, responde a una situación de “raíces históricas”, que el mismo Estado de Chile no ha sabido a encausar, llevando a los “niveles de violencia, odio racial y discriminación que hemos visto en las últimas semanas y que se van haciendo cada vez más difíciles de reparar”.

Si bien esta problemática parece distanciada de los temas ambientales, la perspectiva cambia al observar su inclusión en las políticas públicas: en julio, el proyecto de Ley Marco de Cambio Climático fue aprobado de forma unánime por la Comisión de Medio Ambiente del Senado, luego que distintas organizaciones -entre ellas la Mesa Ciudadana de Cambio Climático-, advirtieran las deficiencias del proyecto en materia de participación ciudadana. A propósito, el 27 de julio, la Corte Suprema emitió un informe dirigido a la comisión parlamentaria, recomendando que se establezcan normas sobre participación ciudadana en la iniciativa. Hace unos díaseste proyecto fue aprobado en la Sala de la misma cámara, también sin votos en contra, por lo que ahora corresponde ser votado en particular en la comisión de Medio Ambiente. Sin embargo, hasta la fecha, ni desde el máximo tribunal, ni desde los parlamentarios, se ha demostrado interés en incluir un proceso de consulta indígena en este proyecto de Ley.

¿Por qué se invisibiliza a las etnias originarias hasta en procesos institucionalizados? Esta pregunta cobra especial relevancia para el mundo ambiental en el contexto actual, donde se cruzan distintos escenarios para que la sociedad se cuestione los parámetros políticos y económicos sobre los que se sostiene.

Sin embargo, para Lorena Arce, este cuestionamiento es una constante que interpreta de forma casi natural, gracias al trabajo que su organización realiza desde sus inicios (2004) y, específicamente, en el programa que coordina, el cual estudia los desafíos que enfrentan muchas comunidades indígenas para la protección de la biodiversidad de sus territorios, “donde encuentran su sustento cultural, material y espiritual”.

Les invitamos a conocer la mirada de Arce, quien representa a su organización en la Mesa Ciudadana de Cambio Climático, siempre poniendo el punto en los dilemas socioambientales que las etnias originarias de nuestro país enfrentan día a día.

– ¿Por qué se produce esta discriminación en los temas ambientales a las comunidades indígenas?

En el caso de pueblos indígenas, resulta difícil tratar por separado los “temas ambientales”, como lo hace la cultura occidental, ya que todos estos se expresan de manera interrelacionada en cada territorio donde se sostiene y reproduce la vida material y espiritual de cada pueblo o comunidad indígena. Las aguas, los bosques, los mares, la biodiversidad, el clima, entre muchos otros, que el Estado aborda sectorialmente a través de distintos órganos e instrumentos, son para los pueblos indígenas parte de un todo, por lo tanto, la afectación de cualquiera de ellos rompe el equilibrio que permite permanecer y “vivir bien” en el territorio.

A esto se agrega el modelo (neo)extractivista, que ha primado no solo en Chile, sino en América Latina, y que entiende a la naturaleza como una fuente inagotable de recursos naturales, esenciales para el desarrollo. Nada más lejos de la cosmovisión de muchos pueblos indígenas y comunidades, especialmente de aquellos que todavía mantienen una convivencia muy estrecha y respetuosa con la naturaleza.

-¿Cuál es la principal deuda del Estado chileno con los pueblos indígenas en la actualidad?

Creo que las diferencias de enfoques y visiones de mundo están en la raíz de la deuda que el Estado chileno mantiene con los pueblos indígenas, al menos en materia ambiental. La insistencia del Estado en imponer su modelo de desarrollo y sus formas institucionales de diálogo sectorial, han impedido avanzar hacia un diálogo intercultural que permita incorporar de manera apropiada los estándares internacionales de derechos de pueblos indígenas en estas materias, como el derecho a la consulta previa y al consentimiento. Esto, a pesar de que tanto el Convenio 169 de la OIT como la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas establecen claramente los derechos al medio ambiente y los recursos naturales de los territorios que habitan y ocupan los pueblos indígenas, así como el deber de los gobiernos de tomar medidas, en cooperación con los pueblos interesados, para garantizar su protección[1].

En este sentido, la deuda ambiental del Estado con pueblos indígenas se expresa en muchas situaciones. Por ejemplo, cuando el Estado prioriza y apoya a industrias extractivas, mineras, forestales, acuícolas, en pos de su “modelo de desarrollo”, por sobre su deber de garantizar la protección de territorios indígenas. O por ejemplo, en el Proyecto de Ley de Biodiversidad, que se inició sin un proceso de consulta previa, libre informada, lo que se logró solo después de un largo proceso de incidencia. En consecuencia, si bien hay avances, ha costado mucho llegar a un proyecto de ley que reconozca de manera adecuada la importancia de los pueblos indígenas en la conservación de la biodiversidad y sus derechos en las áreas protegidas que se sobreponen con sus territorios.

– El Proyecto de Ley Marco de Cambio Climático no establece un proceso de consulta indígena, aun cuando la mayoría de estas comunidades habitan en los territorios más afectados por los impactos del cambio climático que vemos hoy en día, ¿debido a qué factor crees que responde esta carencia?

El hecho de que se haya iniciado la discusión del Proyecto de Ley Marco de Cambio   Climático descartando un proceso de consulta indígena, lamentablemente refuerza lo dicho anteriormente y lo lejos que está el Estado de reconocer el rol clave que tienen los pueblos indígenas en las acciones de mitigación y adaptación frente al cambio climático, a pesar de haber sido claramente señalado en el último informe del IPCC de 2019.

– ¿Cómo pueden aportar las comunidades indígenas para enfrentar los desafíos climáticos, en este y otros proyectos ambientales?

Los pueblos indígenas no son solo una de las poblaciones más vulnerables a los efectos del cambio climático, por lo tanto sujetos de medidas de adaptación, sino también son custodios o guardianes de importantes sumideros de carbono, como los bosques, los humedales, las turberas y áreas marinas, por lo tanto claves en las medidas de mitigación. Como señaló Vicky Tauli, la ex-relatora especial de la ONU sobre los derechos de los pueblos indígenas, en respuesta al informe del IPCC: “por primera vez, los principales científicos del mundo han confirmado lo que siempre hemos sabido: respetar los derechos a la tierra de los pueblos indígenas y las comunidades locales es una solución inmediata y práctica para el cambio climático.”[2]

Al consultar a la División de Cambio Climático sobre las razones para no haber realizado un proceso de consulta indígena de este proyecto de ley, señalaron que siguiendo el procedimiento, pidieron un informe de procedencia al Ministerio de Desarrollo Social. La Subsecretaria de Servicios Sociales de dicho ministerio concluy[3] que “(…) el anteproyecto de Ley Marco de Cambio Climático no es susceptible de afectar directamente a los pueblos indígenas y, por tanto, es de la opinión de que no se requiere un proceso de Consulta Indígena previo a su envío al Congreso Nacional.

– El 27 de julio, la Corte Suprema emitió un informe respecto el contenido del proyecto, en el cual explicitó la necesidad de que las normas sobre participación ciudadana queden establecidas en él. Si se incorpora esta observación, ¿tendría incidencia en los aspectos indígenas que la Ley debería incorporar?

La participación ciudadana se aborda de manera muy débil en este proyecto de ley y es algo que estamos analizando y discutiendo en la Mesa de Cambio Climático. Sin embargo, aunque este logre reforzarse incorporando nuevas normas, esto no reemplaza a la Consulta Indígena y la forma en la que debe ser realizada según lo establece el Convenio 169 de la OIT.

– Actualmente, el conflicto interétnico mapuche ha copado la agenda de prensa nacional. ¿Cómo ven ustedes desde el Observatorio Ciudadano, las problemáticas culturales que se ha dado en el sur de Chile? ¿Cuál es su relación con la “discriminación” ambiental que los pueblos indígenas viven a nivel estatal?

Frente al conflicto entre el Estado chileno y el pueblo mapuche –y que ha ido involucrando cada vez más a la sociedad chilena– lo entendemos como un problema con raíces muy profundas e históricas que el Estado no ha logrado abordar mediante procesos de diálogo horizontal. Por el contrario, ha criminalizado las demandas del pueblo mapuche actuando con medidas represivas que solo han agudizado el conflicto, llegando a los niveles de violencia, odio racial y discriminación que hemos visto en las últimas semanas y que se van haciendo cada vez más difíciles de reparar.

Es en este contexto que nos parece que el proceso constituyente se establece como una posibilidad única de generar dicho diálogo, para abordar los temas profundos –negación, discriminación, despojo territorial– que han generado la conflictividad no solo con el pueblo mapuche, sino también con la mayor parte de los pueblos indígenas del país. Esperamos que este proceso concluya con una Carta Fundamental que establezca las bases de una nueva forma de relación entre el Estado y los pueblos indígenas y que ponga fin a dicha negación y reconozca los derechos colectivos que les corresponden.

 

[1] Art. 7, 15 del Convenio 169, OIT; art. 29 DNUDPI.
[2] https://www.mensaje.cl/el-rol-clave-de-los-indigenas-y-la-alimentacion-para-frenar-el-cambio-climatico/
[3] Oficio Nº3582, 26 de septiembre de 2019, Subsecretario de Servicios Sociales

Observatorio Ciudadano participa de nueva iniciativa de Consorcio TICCA sobre territorios de vida y de pesca comunitaria

El Consorcio TICCA lanza una nueva iniciativa en territorios de vida y de pesca comunitaria para entornos de agua dulce, costeros y marinos. La experiencia de nuestros Miembros acumulada a través de los años apoyará las actividades centradas en la comunidad a nivel local, nacional, regional y global de acuerdo con nuestra misión y nuestro enfoque estratégico.

Las pesquerías comunitarias y los territorios de vida en medios de agua dulce, costeros y marinos son extraordinariamente diversos y prosperan en todas las regiones del mundo, desde los trópicos hasta el Ártico. Sin embargo, a menudo se enfrentan a amenazas comunes provocadas por programas de conservación vertical, por la pesca industrial y por otras actividades destructivas. Así mismo, están afectados de manera general por políticas, leyes y procesos de toma de decisiones exclusivistas.

Los Pueblos Indígenas y las comunidades locales que dependen de la pesca artesanal y de subsistencia para conservar sus identidades, medios de vida, soberanía alimentaria y bienestar demandan cada vez más el reconocimiento y el apoyo adecuados a sus derechos, responsabilidades y prácticas en estos sectores. Esto es esencial no solo para estas comunidades, sino también para los miles de millones de personas en todo el mundo que dependen del pescado y de los mariscos como fuente de proteínas. La pesca comunitaria en territorios de vida – profundamente conectada con territorios o áreas, ecosistemas y especies, culturas, formas de vida y sistemas de gobernanza y de administración específicos – muestran al resto del mundo cómo cuidar de las familias, de las comunidades y de la abundancia de vida de manera simultánea.

Muchos Miembros del Consorcio TICCA y Miembros Honorarios han estado trabajando en estos temas durante décadas, si no generaciones. Esta iniciativa sobre pesca comunitaria en territorios de vida no es ‘nueva’ en el sentido de que pone especial atención en escuchar y aprender de esta valiosa experiencia previa y en el aprendizaje, el intercambio y el apoyo mutuo dentro de nuestra membresía. Al mismo tiempo, es nuestra primera iniciativa financiada que se enfoca en un medio particular de sustento y en ecosistemas específicos.

Estamos muy agradecidos a la Fundación Oak por proporcionarnos nuestra primera subvención para esta iniciativa desde 2020 hasta 2023. Esta subvención apoyará acciones a nivel local y nacional bajo la dirección de nuestras organizaciones Miembro: Costa Humboldt y Observatorio Ciudadano en Chile, Mwambao Coastal Community Network (Red de la Comunidad Litoral de Mwambao) en Tanzania y Land Empowerment Animals People (Tierra Empoderamiento Animales Personas) (LEAP) en Malasia. Facilitará los intercambios a nivel regional y el apoyo y la defensa mutuos en América Latina, África y Asia del Pacífico, al tiempo que involucrará a nuestros Miembros en otras regiones cuando sea posible. A nivel mundial, permitirá la participación en foros de políticas y de leyes internacionales que afectan a las pesquerías comunitarias y a los territorios de vida. Además, aunará conocimientos e investigaciones innovadoras con experiencias en comunicación multimedia que servirán para influir en narrativas más generalistas y en debates sobre la pesca y la conservación en agua dulce y en sistemas costeros y marinos.

Para facilitar el aprendizaje, el intercambio y el apoyo mutuo en esta iniciativa, hemos creado una nueva lista de difusión para los Miembros y los Miembros Honorarios que trabajan en territorios de vida y de pesca comunitaria. Si usted es parte de nuestra membresía y desea unirse a este grupo, comuníquese con nuestra Secretaría (ver más abajo).

Con el apoyo de la subvención de la Fundación Oak, continuaremos estableciendo alianzas respetuosas y equitativas que apoyen otros aspectos de esta iniciativa global, incluyendo actividades a nivel local y nacional en otros países. Póngase en contacto si ya tiene actividades relevantes en marcha o si le gustaría colaborar en propuestas conjuntas para apoyar territorios de vida y de pesca comunitaria en su país o región.

 

CONTACTOS

Lorena Arce
Coordinadora de Iniciativas y Coordinadora Regional para el Cono Sur
lorena (at) iccaconsortium (dot) org

Mohammad Arju
Coordinador de comunicaciones
arju (arroba) iccaconsortium (punto) org

Holly Jonas
Coordinadora internacional
holly (arroba) iccaconsortium (dot) org

Imagen de portada: Isla de Corón, Filipinas © Grazia Borrini-Feyerabend
Traducción desde el inglés: Pilar Caamaño.

Premio Nacional de Literatura 2020: Elicura, la morenidad y la Nación Mapuche

Una noticia que ha circulado en todo el país ha sido el Premio Nacional de Literatura otorgado al poeta escritor y oralitor mapuche, Elicura Chihuailaf, dado a conocer este 1° de septiembre 2020, el mayor reconocimiento que existe en este ámbito en Chile.

El premio llega mientras se vive una crítica huelga de hambre de 26 presos mapuche en las cárceles de Temuco, Lebu y Angol, quienes exigen el cumplimiento de las normas internacionales de derechos indígenas, como también, en medio de un paro como acción de fuerza de empresarios camioneros vinculados a la multigremial que vincula a los principales empresarios que mantienen focos de conflictos territoriales con comunidades Mapuche en la denominada “macro zona sur”.

El Premio Nacional de Literatura 2020 del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, fue otorgado (votación mayoría simple) por una comisión integrada por: Consuelo Valdés, ministra de las Culturas; Ennio Vivaldi, rector de la Universidad de Chile; Diamela Eltit, escritora y última galardonada con el Premio Nacional de Literatura; María Eugenia Góngora, académica, miembro de número y representante de la Academia Chilena de la Lengua; Jaime Espinosa, rector de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación y representante del Consejo de Rectores; Adriana Valdés, ensayista y directora de la Academia Chilena de la Lengua; y María Isabel Lara Millapán, poeta mapuche, doctora en Didáctica de la Lengua y Literatura, y académica de la Pontificia Universidad Católica de Chile, publica así radio Universidad de Chile.

La postulación de Elicura (la tercera en la historia de este premio), fue realizada en esta ocasión desde la facultad de humanidades de la Universidad de la Frontera, sumándose el apoyo de diversas representaciones mapuche, chilenas e interculturales de diversos ámbitos académicos, artístico culturales, socio ambientales, sumándose también diversas destacadas expresiones internacionales, incluida la premio nobel de la paz, Rigoberta Menchú.

Cabe señalar que la huelga de hambre mapuche ha sido uno de los mecanismos de protesta que han debido asumir por años numerosos presos políticos para que se les respeten derechos carcelarios y se establezcan límites a acciones de criminalización establecidas de manera abusiva y desproporcionada, con un amplio reproche, pronunciamientos y resoluciones de organismos internacionales de derechos humanos en contra de estas acciones y con llamados a regular. Frente a esto, Chihuailaf no ha estado ausente en las demandas más profundas de la gran Nación Mapuche.

Una vez conocida la noticia, el oralitor mapuche participó en una transmisión online Ufro facilitada por el profesor y académico, Luis Nitrihual, este 1 de septiembre, indicando lo siguiente con respecto al momento que le dan a conocer el premio desde la comisión: “Es una puerta que se abre para poder decir algunas cosas, también para plantear posibilidades de salida para todo este denominado conflicto que genera el estado y hay algunas cosas que tienen que ver con la poesía, con la palabra poética para abordar el gran problema conceptual, porque aquí se habla que los mapuche que somos mayoritarios allí, no queremos el desarrollo, pero hace rato nuestra gente y yo he tomado esa palabra que está diciendo que sí queremos el desarrollo pero lo queremos con la naturaleza no contra la naturaleza y que cuando se habla de justicia, que se recuerde que a justicia se impuso a la legitimidad de la antigua justicia (…) entonces si las diferentes instancias del estado y del Chile superficial y enajenado, que son unos pocos, van a seguir planteando siempre desde sus conceptos unívocos, entonces es que no quieren la bullada paz que buscan y ocurre que nuestra gente, entre ellas yo, siempre hemos querido la paz, entonces se quiere ver violencia donde no la hay, lo que parece violencia es una defensa de la madre / padre naturaleza, nos levantamos por ternura, porque cuando vemos contaminados los ríos, los lagos, cuando vemos que se arrancan los bosques nativos ¿eso no es violencia?, que es también lo que se pregunta en una de sus escritos: “Recado Confidencial” (a lo chileno).

El poeta mapuche respondiendo a una consulta en dicha transmisión sobre el mensaje que le compartiría a jóvenes, señala: “La palabra poética no es solamente verso, la palabra poética es conversación, la palabra poética es aroma, es textura, es color, es forma y que en este momento en que la naturaleza nos ha dado una dura advertencia, que no nos corresponde a todos, sino a un pequeño grupo de egoístas, dueños del poder económico, no solamente en Chile sino en todo el mundo, entonces ha dado esa dura advertencia para que no siga siendo violentada y sobre todo, nos está dando una gran posibilidad que tomemos el rumbo , este ancho camino, que es el buen vivir el Kvme Mongen y que entonces podamos dialogar, podamos alcanzar un modo distinto de vida, lo que significa, de verdad, que todos hagamos un esfuerzo para que este sistema que es depredador, ya le pongamos fin y que iniciemos ese camino del buen vivir que nos invita al nvtram kam, nos invita a la conversación, que es un arte nos dice nuestra gente mayor, que no está tanto el cómo decir, sino el arte se alcanza cuando se asume la capacidad de escuchar, lo que no ha sucedido hasta ahora (…) no es la palabra solo mía, es la palabra de nuestros kuifi ke che ngen, de nuestros antepasados”.

Elicura Chihuailaf es de Quechurewe, comuna de Cunco. Poeta, oralitor, cronista y traductor mapuche de gran trayectoria y enorme reconocimiento a nivel local e internacional, con varios poemas musicalizados por grupos y solistas como Illapu, Francisca Valenzuela, Manuel García, Nano Stern, Joe Vasconcellos, entre otros. Es asimismo un activo defensor de los derechos humanos, como también de la naturaleza.

Elicura Chihuailaf es parte de una Nación originaria que ha sido invadida por el estado chileno y argentino desde finales del siglo 19 y todo el siglo 20, con diversas acciones bélicas que han generado masacres, desmembramientos familiares y comunitarios, junto a graves crímenes de lesa humanidad, siendo uno de los principales conflictos la falta de reparación y restauración del territorio ancestral despojado, hoy gravemente impactado por industrias forestales, papeleras, proyectos de energía como hidroeléctricas, inmobiliarias, entre otras mega industrias y actividades depredadoras.

El Premio Nacional de Literatura de Chile otorgado a Elicura Chihuailaf, es perteneciente a los Premios Nacionales de Chile, considerado el mayor galardón de literatura. Fue creado el 9 de noviembre de 1942 y es otorgado cada dos año, cuya distinción ha recaído en los últimos años en: (2000) Raúl Zurita, Poeta Zurita (2000); (2002) Volodia Teitelboim, Ensayista; (2004) Armando Uribe, Poeta; (2006) José Miguel Varas, Novelista y cuentista; (2008) Efraín Barquero, Poeta Barquero; (2010) Isabel Allende, Novelista; (2012), Óscar Hahn, Poeta; (2014) Antonio Skármeta, Novelista; (2016) Manuel Silva Acevedo, Poeta; (2018) Diamela Eltit, Novelista.

Cabe señalar también que en Chile, desde hace varios años, activamente se viene sosteniendo desde movimientos sociales un proceso transformador tendiente a exigir el cumplimiento y respeto de los derechos humanos como es la educación, justas reivindicaciones que ha tenido innumerables costos y consecuencias contra la vida e integridad de numerosos estudiantes en el País, cuyas demandas se han basado principalmente en: Educación Pública, gratuita, de calidad, descolonizada, intercultural, igualitaria, con un sistema democratizado o participativo y sin lucro.

En el marco de estas demandas, uno de los problemas que hay en la academia, es el estado de sumisión y complicidad anti ético de casas de estudios vinculadas a grandes empresas en Chile, de multimillonarios que transgreden derechos día a día, que controlan buena parte de la prensa chilena y la libertad de expresión y quienes, no son capaces de restituir en lo más mínimo los daños causados a habitantes donde se desarrollan sus actividades y al medio ambiente, incluyendo conflictos con comunidades, por el contrario, continúan fortaleciendo sus modelos depredadores, sobre explotadores y racistas bajo el silencio, pasividad y complicidad de universidades públicas, denominado también neocolonialismo.

Obras del premio nacional de literatura 2020

Chihuilaf tiene las siguientes obras literarias: El invierno y su imagen, autoedición mimeo, 1977; En el país de la memoria. Maputukulpakey, con algunos poemas en mapudungun; autoedición, Quechurewe-Temuco, 1988 (Edición única de 75 ejemplares numerados y firmados por el autor); El invierno, su imagen y otros poemas azules, Ediciones Literatura Alternativa, 1991; De sueños azules y contrasueños, con poemas en mapudungun y castellano; Editorial Universitaria, Santiago, 1995 (Huerga y Fierro Editores, Madrid, 2002); A orillas de un sueño azul; La palabra: sueño y flor de América, adelanto de una muestra de Oralitura indígena de América, 1997; Recado confidencial a los chilenos, LOM, Santiago, 1999; Kallfv, con ilustraciones de Gabriela Cánovas; Pehuén, Santiago, 2006; Kallfv mapu / Tierra azul, edición bilingüe con prólogo de Osvaldo Baver y selección de Néstor Barron, Ediciones Continente, Argentina, 2008, Kalfv Pewma Mew / Sueño Azul, Pehuen Editores, 2009, La vida es una nube azul, Ediciones Universidad de la Frontera, Temuco, 2015.

Elicura Chihuailaf durante el destape de la pandemia se encontraba en Barcelona junto a su familia en el marco de invitaciones internacionales de literatura, no pudiendo retornar hasta el momento. Actualmente se encuentra en la zona de Asturias desde donde se ha comunicado con ocasión de este premio.

Por Equipo Comunicaciones Mapuche – Radio del Mar – Radio Minga

– Registro inédito Elicura Chihuailaf, de 1994, Ediciones Universidad de La Frontera y Bibliotecas UFRO / https://www.facebook.com/edicionesufro/videos/341582287221770/

– Elicura Chihuailaf luego de conocerse el premio nacional de literatura 2020 / https://www.facebook.com/luisnitrihual/videos/10223672849266190/

– Bio Bio sueño azúl, Illapu – Elicura Chihuailaf / https://youtu.be/ZqBooxL5QPY